La justicia federal secuestró este miércoles documentación vinculada a contrataciones y actas de directorio del Banco de la Nación Argentina, tras la polémica que se desató por la designación del exmarido de la presidenta de la entidad, Silvina Batakis, y los servicios que facturó la vidente Verónica Laura Asad, conocida como "Pitty, la numeróloga".

Se trató de una orden de presentación dictada por el juez federal Daniel Rafecas, en el marco de una causa impulsada por el fiscal Guillermo Marijuan, a partir de una denuncia presentada por la diputada nacional opositora Graciela Ocaña. 

El Banco Nación entregó toda la información que fue requerida en el marco de la investigación, informaron los voceros judiciales, por lo que no fue necesario allanar. Detallaron que el operativo estuvo a cargo de una división de la Policía Federal Argentina.

La denuncia fue presentada el martes por la diputada nacional Graciela Ocaña, quien sobre la base de informes de un programa televisivo sostuvo que "habrían intervenido en el ámbito de sus funciones y sin contar con el aval del directorio" en la contratación de Verónica Asad, una numeróloga conocida como "Pitty", por 1.800.000 pesos. 

La vidente había sido contactada por María del Carmen Barros, gerente general del Banco Nación, quien demandó sus servicios en forma personal. "¿Por qué lo paga el Banco? Eso se lo tienen que preguntar a ella, yo mi trabajo lo hice y fue por dos mangos con cincuenta", expresó Pitty en declaraciones televisivas.

También se incluyeron en la denuncia otros nombramientos como el de Héctor Silva, "exmarido de Silvina Aída Batakis" como gerente de sistemas del Banco, con un sueldo de más de $700.000 y el de Juan Pedemonte, hijo de Barros, "al frente de una gerencia en la casa matriz" de la Nación, se indicó.

También se incluyeron en la denuncia otros nombramientos como el de Héctor Silva, "ex marido de Silvina Aída Batakis" como gerente de sistemas del Banco

“Se dieron a conocer, a través de distintos medios de comunicación, conductas que implican una violación a sus deberes de funcionaria pública e importan una administración fraudulenta de los fondos del Banco Nación, que administran por sus cargos”, dijo la legisladora Ocaña, en el escrito que dio inicio al caso.

La controversia se dio durante el fin de semana y Silvina Batakis quedó imputada junto a la gerente del Banco, María del Carmen Barros, quien fue contratada por Batakis, con un sueldo cercano a los $9.000.000.

"Autorizó, sin consultar ni someter a votación del directorio del banco, a cobrar un sueldo de casi 9 millones de pesos mensuales. A esta friolera suma llega gracias a diversos pluses y premios autorizados por Batakis sin consultar a nadie", denunció Ocaña.

Para la legisladora, ambas cometieron "diversas maniobras fraudulentas para enriquecerse y enriquecer a terceras personas allegadas a ellas a costa del erario público".

El fiscal porteño, Marijuan, requirió que se abra una investigación e imputó a Batakis y a la gerente general María del Carmen Barros por los supuestos delitos de "incumplimiento de deberes de funcionario público", "administración fraudulenta" y "peculado".

La causa tramita en el juzgado federal 9 que subroga la jueza María Eugenia Capuchetti aunque, a raíz de una licencia de unos días que se tomó la magistrada, ese juzgado se encuentra hoy a cargo del juez Rafecas.