El jefe de Gabinete, Nicolás Posse, habla desde las 11 en el Congreso, donde realiza el primer informe de gestión del Gobierno de Javier Milei. La exposición ante el Senado se produce en medio de las tensas negociaciones por la Ley Bases, que mañana seguirá siendo tratada en un plenario de comisiones.

Posse llegó acompañado de unas 15 personas, entre las que se encontraba la vicepresidenta Victoria Villarruel e integrantes del bloque de La Libertad Avanza (LLA). En la previa a este encuentro, el funcionario nacional tuvo que responder más de 1.200 preguntas, que le transmitieron los parlamentarios.

Al comenzar su exposición, que tuvo una extensión de alrededor de 60 minutos, el jefe de Gabinete afirmó que el Gobierno nacional heredó una administración que se trató de "un largo proceso de parche sobre parche".

"La gran pregunta es con qué nos encontramos al tomar la administración. Fundamentalmente en el área económica, también en otras, encontramos un largo proceso de medidas que a veces se contradecían entre sí y que habían llevado al país en una situación de gran inestabilidad", enfatizó Posse en el inicio.

En ese marco, el ministro coordinador continuó: "Evitamos una crisis que probablemente podría haber sido la peor de la historia argentina, ya que combinaba lo peor del Rodrigazo, de la inflación de 1989 y de la crisis de los años 2001 y 2002".

Tras su llegada a la Presidencia, Milei había advertido que habrá que "pasar un momento duro por los descalabros" de la gestión de Alberto Fernández. Y en la misma línea, comparó el momento económico de fines de 2023 con el que se registró durante el Gobierno de Raúl Alfonsín.

Además, el líder libertario justificó las políticas de ajuste que iba a implementar: "Si no hacemos un reordenamiento de las cuentas públicas y ponemos en caja el balance del Banco Central, nos vamos a una hiperinflación que la de Alfonsín va a quedar hecha un poroto", aseguró.

Posse afirmó que "evitamos una crisis que probablemente podría haber sido la peor de la historia argentina"

Luego, sostuvo que la Argentina tiene "un serio problema de credibilidad", ya que "hemos destruido la moneda, dejado al país reservas, descuidado el mantenimiento de la infraestructura". 

En ese sentido, manifestó: "Es nuestro principal trabajo reconstruir esa credibilidad: primero dentro de nuestro país y luego también hacia el exterior para encarar un camino de crecimiento y de desarrollo".

De esta manera, el jefe de Gabinete dijo que las reformas impulsadas por el Gobierno nacional a través de la Ley Bases van a "acelerar el proceso de recuperación" y que "van a hacer mucho más confiable a la Argentina para recibir inversiones".

Sin embargo, las negociaciones entre los bloques y el Ejecutivo siguen muy tensas: el Gobierno tuvo que ceder nuevamente ante la oposición con modificaciones a la Ley y el paquete fiscal. El oficialismo no logra pasar el difícil examen del Senado, que exige cambios en ambos proyectos. 

El oficialismo no logra pasar el difícil examen del Senado para aprobar la Ley Bases

En principio, ya se anunció que se postergará la firma del Pacto de Mayo, que iba a ser el próximo 25. El presidente Milei adelantó que podría ser en junio o julio, todo dependerá de los tiempos legislativos que lleve la sanción definitiva del paquete de reformas. 

En la Casa Rosada hay un clima de resignación con la fecha del 25 de mayo, pero con la convicción de que igual saldrá el pacto con los gobernadores más adelante.

En otro tramo de su exposición, Posse habló sobre la reducción de la estructura del Estado establecido por la gestión de LLA: "Tenemos un Estado que no solo es muy grande y nos ha resultado imposible de pagar, por eso los niveles de déficit que hemos alcanzado y que nos han llevado a los niveles de inflación que estamos padeciendo, sino también que se ha vuelto tremendamente ineficaz y da servicios a los ciudadanos de muy mala calidad", argumentó.

La senadora de la UCR por Santa Fe, Carolina Losada, le consultó al jefe de Gabinete por los despidos de empleados públicos y aclaró que recibió denuncias de que "se están dejando a los ñoquis".

Posse le respondió que el criterio sobre el empleo público es "mantener a la gente que trabaja y trabaja bien", pero ratificó que "si hay casos donde esto no ocurre, se trabajará en corregirlos".

En tanto, hizo referencia a la denuncia por supuestas irregularidades en contrataciones de seguros en dependencias oficiales durante el mandato de Alberto Fernández: “Una de las cosas que nos llamó la atención es la cantidad de autos que tenía cada ministerio y agencias. El 30% de esos autos no solo estaban en desuso, sino que no había ningún plan para ponerlos en funcionamiento. El otro dato curioso es que la mayoría de esos autos tenían impagas las patentes, pero tenían pagos los seguros”, detalló Posse. 

En ese sentido, explicó que "se había definido, a través de un decreto, que todas las agencias del Estado nacional debían contratar seguros con el Banco Nación y se habilitaba la contratación de brokers, en una situación curiosa, porque se trataba de una contratación directa entre dos áreas del Estado, y que no necesitaba de intermediarios”, aseguró.

El expresidente Fernández fue imputado en la causa que investiga el juez federal Julián Ercolini y fue impulsada por el fiscal federal Ramiro González, quien ya requirió las primeras medidas de prueba.

Horas más tarde, Alberto argumentó que esa denuncia era "falsa" porque se trataba de "una operación" en su contra, y que durante su mandato no hizo "negocios con nadie". 

También fueron imputados el extitular de Nación Seguros S.A., Alberto Pagliano y Héctor Martínez, broker de seguros y amigo del exmandatario, casado con María Cantero, quien fue secretaria del exmandatario. 

Por otra parte,  acusó a los piqueteros de montar "esquema de esclavitud moderno", en relación con la causa por extorsiones a beneficiarios de planes sociales.

"En muchos planes encontramos irregularidades, lo que había sido diagnosticado por Javier Milei en la campaña, un sistema de estructura piramidal, autoritario, donde un primer nivel era la lista de espera, gente que no tenía acceso a comedores".

Y agregó que "este sistema se movía con un esquema de castigos y amenazas, mostraba una gran injusticia en su estructura, en niveles superiores se cobraban de dos a cuatro planes, se forzaba a la gente de niveles inferiores a vender comida suministrada por el Estado para luego quedarse con la ganancia".

Posse advirtió además que "se hizo una auditoría cuyos resultados arrojaron que casi el 50% de los comedores no existían y en muchos casos presentaban direcciones donde no funcionan".

Luego de que el senador por Corrientes Eduardo Vischi (UCR) le consultara a Posse de qué lugar son las familias beneficiarias con los "vouchers educativos", el jefe de Gabinete indicó que fueron adjudicados a personas de "las 24 jurisdicciones del país".

"Me temo que la educación de la Capital Federal el 50% es privada. Estoy de acuerdo con que haya la colaboración, pero lo que veo es que nuevamente estamos en un sistema desbalanceado federalmente", consultó Vischi.

En tanto, el jefe de Gabinete respondió: "Los vouchers se adjudicaron a las 24 jurisdicciones del país. De hecho, las provincias de Buenos Aires tiene un sistema de apoyo alternativo".