El cierre de listas con vistas a las PASO del 13 de agosto no lograron frenar las diferencias internas en Unión por la Patria pese a haber logrado una fórmula presidencial de unidad con Sergio Massa y Agustín Rossi.

La primera en revelar las diferencias fue Cristina Kirchner el lunes pasado en un acto que encabezó con el ministro de Economía en Aeroparque para recordar "los vuelos de la muerte" durante la dictadura. La vicepresidenta dejó en evidencia que no le gustó la actitud de Alberto Fernández de empecinarse con dirimir a los candidatos en las primarias. También cuestionó la actitud de la ministra de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz, por pelar por un cargo en las listas.

Las respuestas de algunos de los involucrados no tardaron en llegar. La candidata a diputada habló del "maltrato" de parte de la vicepresidenta y de que "no le sería fácil borrar" lo que aconteció. “Cuando Cristina quiere dar palitos, más que palitos da palazos. Lo de ayer fue un palazo frontal”, afirmó la funcionaria.

La senadora provincial, Teresa García, también se sumó a los cuestionamientos hacia la titular de Desarrollo y al canciller, Santiago Cafiero. "No se puede dejar pasar esta falta de respeto a quien conduce este proceso político. Cristina no le faltó el respeto a Victoria", afirmó la legisladora. García fue más allá con sus críticas: "Cafiero y Victoria no se merecen los cargos que tienen".

La ola de críticas continuó por parte del ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, contra el presidente Alberto Fernández por la decisión de bajar a Daniel Scioli de las listas. “Alberto Fernández es el ideólogo y el arquitecto de lo que pasó con Scioli, primero le pidió que sea candidato y después le soltó la mano”, se descargó el ministro.

En sintonía con las declaraciones de Cristina Kirchner, Berni fue mucho más duro con el jefe de Estado: “Alberto Fernández es parte de la historia y no tengo dudas que el día que se vaya, se va a ir en total soledad”, marcó sobre la actitud del Presidente.

Las críticas, que se escucharon en las últimas horas, forman parte del malestar de ciertos sectores de Unión por la Patria ante el sorpresivo y desordenado cierre de listas del sábado pasado, donde hubo cambios del candidato presidencial y del vicepresidente.

El albertismo fue el sector más golpeado no sólo por las críticas de Cristina sino porque logró pocos espacios en las listas de diputados de la provincia de Buenos Aires. El embajador de Brasil dijo que se sintió traicionado por Alberto Fernández, mientras que la vicepresidente lo llamó para consolarlo.