Bill Gates perdió USD 400.000 millones a raíz de su "mayor error"
El magnate reveló que una decisión de su pasado lo hizo perder 400.000 millones de dólares. “Fue una mala gestión de mi parte”, admitió
Bill Gates no es solo el magnate que cofundó Microsoft y amasó una fortuna. También es un hombre capaz de reconocer públicamente sus propios errores. En 2019, dejó en claro que su mayor fallo empresarial le costó a Microsoft USD 400.000 millones: no haber apostado por Android cuando tuvo la oportunidad.
En sus primeros días, Android navegaba en aguas inciertas entre Microsoft y Google. Gates creyó que Apple tenía dominado el mercado móvil y no consideró estratégico lanzarse a competir. Google tomó la delantera y convirtió a Android en la plataforma dominante fuera del ecosistema Apple. "El mayor error de todos los tiempos fue una mala gestión de mi parte. Microsoft debía haber ganado ese mercado de manera natural", admitió el magnate.
Sin embargo, Rich Miner, cofundador de Android, echó sal en la herida. Aclaró que el objetivo de su sistema operativo era impedir que Microsoft replicara en los teléfonos su monopolio en las computadoras. Con ironía, comentó: "Siempre me resulta divertido oír a Gates quejarse de perder frente a Android. Lo siento, Bill, sos más responsable de lo que pensás".
Del fiasco al litio argentino
Dejando de lado sus fallos tecnológicos, Gates se reinventó como un referente en la lucha contra el cambio climático. Su fondo Breakthrough Energy Ventures invierte en proyectos que buscan reducir emisiones de carbono y acelerar la transición hacia un futuro sostenible.
El litio, conocido como “oro blanco”, es un recurso estratégico en esta agenda. Argentina, con la segunda mayor reserva mundial, se posiciona como un actor clave en la producción de baterías de alta densidad para vehículos eléctricos.
Entre las iniciativas más destacadas de Gates figura una inversión de USD 20 millones en Lilac Solutions, una startup que promete optimizar el uso del agua y reducir el impacto ambiental de la extracción de litio. Estas acciones subrayan la relevancia de Argentina como un eslabón crucial para las tecnologías limpias.
Mientras Gates reflexiona sobre sus pérdidas pasadas, su apuesta por el litio argentino muestra un camino hacia la redención. El magnate no solo busca soluciones tecnológicas, sino que también intenta convertirse en un engranaje clave para un planeta más sostenible.
Al final, ¿será el “oro blanco” la revancha de Bill Gates en su historial de éxitos y fracasos? Si algo está claro, es que el magnate no teme correr riesgos para cambiar el futuro.