Agentes de la Policía detuvieron en Valencia, España, a una exjueza argentina acusada de "conseguir panzas", identificando a mujeres embarazadas en situación de vulnerabilidad para entregar en adopción a sus hijos a matrimonios adinerados, obteniendo ventajas económicas a cambio.

La exjueza fue expulsada de la carrera judicial en 2017 después de una denuncia del colegio de abogados de Pilar, por decisión del Jurado de Enjuiciamiento de la Provincia de Buenos Aires en una resuloción que se tomó por unanimidad, acusada de numerosas y graves inconductas. 

La mujer enfrenta cargos de cohecho activo y falsedad documental público, con una pena máxima de seis años de prisión. Mientras ejercía como titular de un Juzgado de Familia en Pilar, y lucraba proponiendo a asistentes sociales de su equipo acudir a barrios pobres para identificar mujeres dispuestas a dar en adopción a sus futuros hijos.

Se trata de Alejandra Claudia Velázquez, extitular del Juzgado de Familia número 1 de Pilar, acusada también de manipular la fecha de diversos documentos públicos, simulando que su firma había sido estampada en distintas resoluciones judiciales cuando ya no estaba en funciones.

Velázquez también está acusada de obligar a los funcionarios de su juzgado a suplantarla para dar salida a los asuntos mientras ella estaba "de viaje cultural", someterlos a un acoso laboral que dejó medio juzgado en situación de baja psicológica u obligarlos a asumir sus funciones en juicios, interrogatorios y otras diligencias de obligado cumplimiento por el juez.

Los trabajadores de su juzgado afirmaron que le tenían “terror” y una de las empleadas contó que sufrió un aborto en pleno juzgado y no pudo ser llevada por una compañera al hospital porque la jueza lo impidió.

La orden internacional de detención permitió a los agentes ubicar a la exjueza en Valencia, donde fue arrestada en el distrito de Extramurs a primera hora de la tarde del lunes, según informó el diario Levante.