El intendente de Tigre, Julio Zamora, es destinatario de un sinfín de reclamos por parte de quienes aseguran ser beneficiarios de viviendas que el municipio se comprometió a construir, y que hasta el momento no fueron entregadas.

El 15 de agosto habrá un sorteo de 49 viviendas, para adjudicarles a algunas de 1.700 familias que ya hace unos meses fueron ingresadas a un listado con la promesa de recibir una casa. Sin embargo, parece que entraron nuevos nombres y sacaron a otros que estaban de antes. Ahora, voceros de esas familias exigen presenciar del sorteo para asegurar la transparencia, ya que hay sospechas de que podría haber acomodo en el proceso. El plan inicial abarcaba 212 viviendas, de las cuales recién 49 están listas para entregar y por eso el sorteo.

"Desde el municipio nos dicen que el sorteo se hará en el municipio y lo veamos por Instagram, pero hay muchas familias sin acceso a internet. Lo correcto es que el sorteo se haga público", expresó Jimmy, uno de los afectados.

"Hemos pedido reuniones con funcionarios, pero no nos atienden, nos contestan cualquier cosa", agregó el vecino, quien apuntó especialmente a Eduardo Barros, subsecretario de Hábitat y Economía Popular. "No nos da respuesta y además se enoja porque hacemos los reclamos por Facebook", expresó el vecino. "Otro elemento que no se está respetando es que en este grupo de familias tenemos personas discapacitadas", añadió.

Otra vecina, Jazmín, refirió que "muchas de las familias estamos anotadas hace varios años, y la solución nunca llega". En un tono que permitía percibir indignación, la mujer agregó que "me dejaron afuera del sorteo bajo la excusa de que no fui a actualizar mis datos, algo que hice varias veces. Me dijeron que me llamaron y no contesté. Cuando exigí que me mostraran a qué número me llamaron, ninguno de los que figuraban en su planilla era mío".