La Oficina Regional de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para Europa advirtió sobre las brechas en la cobertura de vacunación contra la polio en la región.

Durante 2024, se observó una preocupante disminución en las tasas de inmunización, dejando a 450.000 bebés desprotegidos.

Esta situación se presenta en el contexto del Día Mundial contra la Polio, donde se destacan los logros desde el inicio de la Iniciativa Mundial para la Erradicación de la Polio en 1988.

A nivel global, los casos de poliovirus salvaje han disminuido en más del 99%, pasando de 350.000 niños afectados al año a menos de 50 en 2025.

A pesar de que la Región Europea de la OMS se ha mantenido libre de polio desde 2002, los déficits en la vacunación representan un riesgo para la seguridad sanitaria de la región y del mundo.

Desde septiembre de 2024, se ha detectado una variante del poliovirus tipo 2 en los sistemas de aguas residuales de seis países europeos: Finlandia, Alemania, Israel, Polonia, España y Reino Unido.

La muestra más reciente se encontró en Alemania en septiembre de este año. Afortunadamente, gracias a la suficiente cobertura de vacunación en las zonas afectadas, no se ha registrado transmisión comunitaria ni casos de polio paralítica.

En febrero, se detectó la circulación de otra variante del poliovirus, tipo 1, en Israel, donde se declaró un brote. Israel mantiene un sistema de vigilancia del poliovirus de alta sensibilidad, lo que permite la rápida detección del virus.

Sin embargo, las deficiencias en la inmunización de grupos de alto riesgo obligaron a tomar medidas para aumentar la tasa de vacunación. En los últimos dos meses, el país no ha detectado poliovirus. El director de Seguridad Sanitaria y Emergencias Regionales de Europa, Ihor Perehinets, enfatizó la importancia de la vacunación oportuna de todos los niños.

 

"No debemos volver a una época en la que la polio amenazaba vidas con regularidad y saturaba los sistemas de salud", alertaron desde el organismo sanitario.

 

La OMS reitera su compromiso con los Estados miembro para erradicar todas las formas de poliovirus en el mundo, fortaleciendo los programas de inmunización y respondiendo rápidamente a las detecciones del virus para evitar su propagación.