Genneia se sumó este jueves al grupo de empresas que debieron salir a reestructurar su deuda con el mercado ante la negativa del Banco Central a vender más del 40% de los dólares que necesitan para cancelar sus compromisos. De esta manera, se sumó al Banco Hipotecario, IRSA y Cresud, las compañías que más concentraban vencimientos de Obligaciones Negociables (ON) durante noviembre.

Es que el mes que viene vencen cerca de USD600 millones del sector privado, pero por la disposición del BCRA deberán realizar un canje de como mínimo el 60% del monto en cuestión.

Lo cierto es que Genneia ofreció a sus acreedores un nuevo bono por USD51,5 millones, que debía cancelar el 23 de noviembre, con el mismo cupón del 12% y a dos años. Para incentivar el ingreso al proceso, ofreció dos opciones, con un “early bird” para aquellos que acepten la propuesta antes del 5 de noviembre:

• Opción Base: consiste en 40 centavos de dólar en efectivo por cada USD1 nominal de las viejas ON, y el remanente en los nuevos títulos, más una contraprestación en pesos en efectivo del 1% del valor nominal
• Opción Par: USD1 nominal de las nuevas ON por cada USD1 de las Obligaciones a canjear, más un 4% de pago en pesos en efectivo del valor nominal.

En los dos casos, el desembolso en moneda local se tomará al tipo de cambio oficial.

En ese sentido, la compañía se encargó de aclarar que el plan de refinanciación se decidió "por la disposición cambiaria del BCRA" y que "cuenta con los fondos necesarios para cumplir con sus compromisos".

"Éste no era el objetivo inicial de la compañía, que ya había anticipado el fondeo para pagar sus obligaciones de 2020 con dos emisiones sucesivas de bonos locales (mayo y agosto), demostrando su flexibilidad financiera y su acceso al mercado de capitales local", se jactó en un comunicado.

Además de esta ON, en diciembre deberá hacer frente al vencimiento de otro bono por USD6,8 millones.

El mayor compromiso del mes próximo está en manos del Banco Hipotecario, con una Obligación de USD280 millones. La entidad financiera logró canjear el 47% por un nuevo bono y pagará el resto con fondos propios. Le siguen otras dos empresas también propiedad de Eduardo Elsztain: Cresud con USD73,6 millones e IRSA con 181,5 millones, para los cuales siguió la misma estrategia de reestructuración voluntaria.

Por su parte, Petroquímica Comodoro Rivadavia ya consiguió los USD36 millones que necesitaba para despejar un vencimiento de febrero, mientras que IMPSA puso en marcha un agresivo programa para un Acuerdo Preventivo Extrajudicial (APE) que consiste un fuerte recorte en los intereses de su deuda y una posterior salida a la bolsa.