Mientras los argentinos dan por sentado que el lunes próximo el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) confirmará la aceleración de la inflación en junio que adelantó la mayoría de las consultoras, la realidad en los países de la región es distinta, con siete casos en los que el máximo índice mensual fue de 0,24% y que en conjunto promediaron una leve caída de 0,001% respecto de los niveles de mayo.

Ese fue el promedio simple de la inflación informada por los institutos de Estadística de Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Paraguay, Perú y Uruguay, en un contexto en el que por segundo mes consecutivo Bolivia presentó un Índice de Precios al Consumidor superior al de la Argentina.

Junio agregó otra anomalía en la región por la inexistencia de datos oficiales y privados de Venezuela, donde a la ya habitual postergación de los informes que hasta mediados del año pasado daba el Banco Central de ese país, en ese mes se sumó la prohibición de la difusión de estimaciones particulares, que hasta mayo solía dar a conocer el Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF).

 

Una inflación alta para el contexto regional

 

El lunes 14 de julio está previsto que a las 16 el Indec haga público el informe de la inflación de junio que, en base a las estimaciones de las consultoras, será mayor al 1,5% registrado en mayo y que podría ubicarse entre el 1,8% y el 2,1%.

Esos porcentajes no solo son muy superiores a los del resto de la región (con las excepciones ya señaladas de Venezuela y Bolivia) sino que en los casos de Perú y Ecuador son incluso mayores a la tasa interanual.

La brecha entre la inflación argentina y la de la región se redujo de manera significativa a partir del segundo semestre de 2024, pero aún queda en evidencia que el desempeño está lejos de presentar un nivel que puede equipararse.

 

Una excepción que sorprende a la luz de resultados anteriores es la de Bolivia, que hasta fines de 2023 contaba junto a Ecuador con los menores índices de la región, pero desde principios de 2024 comenzó a evidenciar un incremento en los precios minoristas que de a poco la despegó de ese grupo de privilegio.

En junio, la inflación en el país del Altiplano fue del 5,21%, más del doble que el IPC esperado para la Argentina, en tanto el acumulado interanual trepó al 23,96%, con una tendencia creciente que permite anticipar que antes de que finalice 2025 también será mayor a la que acumulará nuestro país en doce meses.

 

Los siete magníficos

 

La situación en los siete países restantes mostró en junio dos casos de deflación en Chile y Uruguay, respectivamente con -0,4% y -0,09%, con Paraguay son variación en el índice y subas que fueron del 0,05% en Ecuador y 0,08% en Perú al 0,10% en Colombia y 0,24% en Brasil.

 

Así como todos los índices mensuales comenzaron con “0”, las tasas interanuales fueron de un dígito sin excepción, una performance para la que la Argentina tendría que esperar hasta fines de 2027, según las estimaciones de los consultados por el Banco Central en el último Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM).

En orden decreciente, más allá de los casos de Venezuela, Argentina y Bolivia, el país sudamericano con la inflación interanual más elevada es Brasil, con el 5,35%, seguido por Colombia (4,82%), Uruguay (4,59%), Chile (4,1%) y Paraguay (4%).

Con una inflación que comenzó con “1”, pero interanual, figuraron Perú (1,73%) y Ecuador (1,65%).