El presidente de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC), Natalio Mario Grinman, expresó hoy un encendido apoyo a la gestión del gobierno y fustigó la actitud de la oposición, asegurando que el rol que cumplió en la sesión del miércoles en el Congreso le dio “asquito”.

“No sé si es el momento para ser políticamente correcto”, expresó Grinman al hablar en la apertura de la 22° edición del Council of the Americas, para pasar a hacer una apreciación acerca de la sesión en la Cámara de Diputados.

Al respecto, señaló que “ayer el Congreso logró voltear un veto presidencial. Lo que yo considero sin eufemismos un asquito es la posición de los legisladores”, manifestó.

 

“Nadie puede discutir que los jubilados están mal, históricamente estuvieron mal, pero son ellos (por la oposición) los que incorporaron cuatro millones (de jubilados) sin aportes y ahora se rasgan las vestiduras”, dijo, para agregar que “el tema es de dónde salen los fondos genuinos, si no, vamos a jugar al estanciero”.

 

“Están pensando en cuidar sus prebendas”

 

Grinman no se detuvo en sus críticas a la oposición y planteó “por qué no pedirle a los legisladores que son tan brillantes, que sancionen una ley para que todos seamos felices”.

En ese sentido, aseguró que esos legisladores “no están pensando en la población, están pensando en cuidar sus prebendas, sus posiciones partidarias”, además de enviar un mensaje destinado a la ex presidente Cristina Fernández de Kirchner, al señalar que “en la Argentina no hay presos políticos, sino políticos presos por corrupción”.

 

En su apoyo al presidente Javier Milei, Grinman recalcó que en la CAC “no somos liberales desde el 10 de diciembre de 2023, los principios liberales están en nuestro estatuto del 7 de noviembre de 1924. Está de más aclarar que estamos muy cómodos con este modelo”.

Pese a las declaraciones en las que criticó con dureza al kirchnerismo, indicó que la entidad “no hace política partidaria, pero sí política empresaria” y que la cámara “siempre tuvo la misma posición ideológica, ya que a cada gobierno le presentamos nuestro ADN”.

 

Dos caminos

 

En uno de los pasajes del discurso más comentado entre los concurrentes al encuentro, Grinman se refirió a los “dos caminos” que se presentan para las próximas elecciones, en la que se requerirán “definiciones sobre qué es lo que queremos para nuestro país”.

“No hay muchos caminos. Podemos optar por un creciente peso del Estado sobre el sector privado, con regulaciones por doquier, o por la remoción del Estado y liberar toda las trabas posibles; persistir en un proteccionismo aislacionista o insertarnos en un mundo globalizado; entre las prebendas o las reglas claras; alinearnos con países con ideologías tremendamente diferentes a la nuestra o con los que están encaminados correctamente”.

También planteó la opción entre “abrazarnos a la corrupción más descarada o bien regirnos por la ética” y , en otro de los pasajes interpretados como de decidido apoyo al oficialismo, entre “elegir frases almibaradas o a veces adoptar formas bruscas que pueden parecen agresivas pero que dicen la verdad”.

 

“Para decirlo con toda claridad: podemos optar por el bien o podemos optar por el mal, son dos caminos”, sentenció.

 

Mensaje a Kicillof

 

En el final de su alocución, Grinman tuvo una mención al gobernador bonaerense, Axel Kicillof, al recordar su intervención en el Congreso cuando era secretario de Economía en 2012, en defensa de la expropiación de YPF.

“Hubo un ministro de Economía -en realidad era viceministro de Hernán Lorenzino- que trató de tarados a los que creían que había que respetar el estatuto de la empresa. Esa picardía criolla nos costó por los menos USD 16.000 millones”, advirtió.