La Cámara de la Construcción expresó "preocupación" por la "incertidumbre" que genera el cierre de Vialidad
Los empresarios indicaron que con su disolución queda afectada la capacidad de planificación estatal y la generación de empleo
Los empresarios de la industria de la construcción sumaron hoy su manifestación de “profunda preocupación” a la ya expresada por el gremialismo luego de la decisión del Gobierno de disolver la Dirección Nacional de Vialidad (DNV), en uno de los últimos actos administrativos antes de la finalización del plazo de facultades delegadas.
La Cámara Argentina de la Construcción (Camarco) sostuvo que “la eliminación de este organismo técnico con casi un siglo de trayectoria en la obra pública afecta la capacidad del Estado para planificar, licitar y controlar proyectos viales de forma eficiente y transparente”.
El organismo fue creado en 1932 y desde entonces “garantizó durante décadas una mirada federal sobre la infraestructura del país, con equipos profesionales formados para llevar adelante obras en todas las regiones”, indicó la entidad en un comunicado.
Mediante el decreto 461/2025, se dispuso el cierre de la DNV y otros organismos del área vial, al tiempo que se traspasaron parte de sus funciones al Ministerio de Economía y a la Gendarmería Nacional, decisión que para la Cámara “genera una fuerte incertidumbre”.
“Hay preocupación por la continuidad de obras estratégicas, el impacto en el empleo y la afectación de la articulación público-privada que durante décadas sostuvo el desarrollo de la infraestructura vial”, advirtió Camarco, ya que de los más de 40.000 kilómetros de la red vial nacional quedarán bajo el sistema de concesión por peaje unos 9.154 kilómetros, con más de 30.000 que pasaran a ser atendidos por la Secretaría de Transporte.
Impacto en la vida cotidiana
Ese aspecto “constituye una seria preocupación por el importante impacto en la producción y logística y, sobre todo, en la vida cotidiana de miles de argentinos”, señalaron los empresarios, quienes puntualizaron que “la inversión en caminos y rutas no representa un gasto, sino una herramienta para crecer, generar trabajo y fortalecer el entramado productivo nacional”.
“El país necesita previsibilidad para seguir generando empleo, inversión y crecimiento en todo el territorio”, remarcó Camarco, que reafirmó su “disposición a trabajar junto al Estado en el diseño de políticas que garanticen obras sostenidas en el tiempo, con reglas claras y una visión federal del desarrollo” y en consecuencia pidió al Gobierno “abrir instancias de diálogo con una mirada estratégica”.
La posición de la Cámara se da a conocer luego de los rechazos al cierre de la DNV expresados tanto por la CGT como por el Sindicato Trabajadores Viales y Afines de la República Argentina (STVyARA).
Para la secretaria general del sindicato, Graciela Aleñá, "la desregulación de Vialidad Nacional establece una pérdida de la soberanía vial federal donde decisiones sobre rutas, licitaciones y obras pasarán a estar en manos de privados o funcionarios sin anclaje territorial”.