El poder de compra del salario promedio registrado aumentó en los últimos doce meses respecto de los precios de los alimentos, pero como estos valores tuvieron incrementos superiores a los costos, los productores agropecuarios resultaron perjudicados.

De acuerdo con la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro), “el salario promedio medido por el Ripte (Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables) mostró una mejora sustancial en su poder de compra frente a los alimentos básicos durante el último año”, pero como contrapartida “los costos han aumentado por encima de los precios, afectando la rentabilidad de los productores”.

 

Salarios y poder de compra

 

Si bien los aumentos de los servicios públicos y privados tuvieron desde la asunción presidencial de Javier Milei aumentos superiores a la inflación promedio, los salarios registraron una mejora respecto de los precios de un conjunto de alimentos seleccionados por Coninagro.

Al respecto, la entidad destacó que en el caso del aceite de girasol, el poder adquisitivo del salario aumentó un 49%, lo que permitió adquirir 116 botellas de 1,5 litros adicionales, ya que en marzo de 2024 el salario alcanzaba para 237 botellas, mientras que en el mismo mes de este año se incrementó a 353 botellas.

Respecto a la yerba mate, la mejora fue aún más significativa, con un 72% de aumento en el poder de compra. Esto equivale a 128 kilogramos adicionales, al pasar de 356 paquetes de medio kilo a 613 paquetes en el mismo período.

El incremento fue del 57% en el caso de la leche, con 335 sachets de un litro adicionales. En marzo de 2024, el salario promedio permitía comprar 583 sachets, mientras que un año después la cantidad alcanzada ascendió a 917 unidades.

 

Asado, huevos y pan

 

Para el asado, el poder de compra creció un 16,4%, lo que habilitó la compra de 18 kilogramos más. De 111 kilos posibles en marzo de 2024, se pasó a 130 kilos en marzo de este año.

El salario permitió comprar un 33% más de huevos, lo que representa 90 medias docenas adicionales: en marzo de 2024, se podían adquirir 293 medias docenas, y en marzo de 2025, 390. 

Por último, el pan mostró una mejora del 28% en términos de poder adquisitivo, con 90 kilogramos más disponibles. El salario pasó de alcanzar 319 kilos en marzo de 2024 a 409 kilos un año después.

 

El impacto en los productores

 

El rezago en el precio de los alimentos permitió compensar en parte el deterioro del poder de compra del salario, pero Coninagro advirtió que “para los productores de algunos alimentos este atraso relativo en los precios representa una dificultad”.

“El impacto se observa con mayor intensidad en productos como la yerba mate, con costos que han aumentado por encima de los precios, afectando la rentabilidad de los productores”, indicó la Confederación, para agregar que “esta situación se replica en varias economías regionales que abastecen el mercado interno”.

Entre los ejemplos citados en el informe, entre marzo de 2024 y el mismo mes de 2025 la cebolla ha perdido el 51,6% de su valor real, la naranja el 48,5%, el arroz el 48,1%, el azúcar el 35,6% y la harina el 30,1%.