A casi tres semanas de la invasión rusa a Ucrania, el gobierno de Vladímir Putin dispuso de una lista de 40.000 combatientes del ejército sirio y milicias aliadas listos para incorporarse a su operación militar en el país vecino, aseguró ayer el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH). 

De acuerdo al organismo de derechos humanos, oficiales rusos, en coordinación con militares sirios y milicias aliadas, instalaron oficinas de registro en áreas controladas por el régimen de Bashar al Asad, el cual resultó victorioso en la guerra civil gracias al apoyo de Moscú. 

"Más de 40.000 sirios se han inscrito para combatir junto a Rusia en Ucrania", afirmó Rami Abdel Rahman, jefe del observatorio con sede en Londres, y agregó que los oficiales rusos en Damasco dieron su visto bueno a 22.000 de los inscritos.

En simultáneo, otros 18.000 hombres se registraron con el gobernante partido Baas y serán evaluados por el Wagner Group, un contratista militar ruso, señaló el organismo de monitoreo.

Rusia les prometió un salario mensual de 1.100 dólares para combatir en Ucrania, informó el observatorio, eso traduce en una paga 30 veces mayor a su salario máximo de 35 dólares en Siria. También les ofreció una compensación de 7.700 dólares si resultan heridos y sus familias recibirán 16.500 dólares si mueren en combate.

La revelación surgió una semana después de que el Kremlin dijera que los voluntarios, incluidos los de Siria, serán admitidos para combatir junto al ejército ruso en Ucrania. “Ya hay más de 16.000 solicitudes”, indicó el ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu, la semana pasada. 

Shoigu enfatizó que la Legión Extranjera solo se enviará al Donbás, donde se encuentran las regiones separatistas de Lugansk y Donetsk.

“Hemos recibido una gran cantidad de solicitudes de varios grupos de voluntarios de diferentes países, que desean venir a las repúblicas populares de Lugansk y Donetsk para participar, de la forma que crean conveniente, en el movimiento de liberación”, agregó el funcionario ruso.