El “había una vez” en la Argentina reseña que ante las políticas neoliberales del gobierno al mando de Carlos Menem, para la década del 90, se plantó el Movimiento de Trabajadores Argentinos (MTA). Se trató de una corriente sindical que desde la CGT surgió liderada por gremios como Aeronavegantes, Camioneros y la Unión Tranviarios Automor (UTA) encarnaron una defensa a pleno de los derechos laborales, no solo en cuanto al aspecto sarial y fue liderada por Alicia Castro, Hugo Moyano y Juan Manuel Palacios respectivamente.

Al compás del rock nacional y desde la canción de Luis Alberto Spinetta, “Los libros de la buena memoria”, puede citarse al MTA como importante en su época y clave para entender el desarrollo del sindicalismo argentino. Su traza tan sindical como política se reedita hoy con otros actores. Una saga que ya había anticipado BAE Negocios, la cual desde dicha tónica y ante nuevos riesgos de la era libertaria hace a la convocatoria por la unidad y la acción directa, del 14° Plenario de Delegadas y Delegados de Base Aceiteros y Desmotadores. Convocatoria de la Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, Desmotadores de Algodón y Afines (Ftciodyara), que reunió a representantes sindicales de todo el país como también a sindicalistas que no pertenecen a esa organización sindical dentro del sector de agroexportadores, analistas en materia económica y del derecho laboral.
Hubo coincidencias en la plena oposición a las políticas económicas del gobierno de Javier Milei durante las deliberaciones en la sede del Club Español de la Ciudad de Buenos Aires.

Daniel Yofra, titular de la federación aceitera llamó a la movilización. “Nada ni nadie nos va a salvar si no ponemos de pie a la clase trabajadora. Tenemos que salir a dar batalla, a hacer huelga, a sostener lo que tanto nos ha costado ganar. Porque nadie nos regaló nada”, fue uno de los párrafos de Yofra durante el panel de cierre: “Situación de los trabajadores frente al ataque neoliberal”.

En realce a su gremio el sindicalista recordó la lucha desarrollada para conquistar los actuales salarios y condiciones laborales del sector. “Es cierto que con un día de paro no se consigue nada, pero si se hace un paro por tiempo indeterminado, díganme ustedes, los aceiteros y desmotadores, si eso sirve o no sirve”, dijo Yofra. Fue una reseña a las  huelgas de 2015 por 25 días, la de 2020 bajo la gestión macrista por 22 días y la de 2024 por 7 jornadas. “Hasta 2010 teníamos salarios de pobreza. Todo lo conseguimos con lucha y huelga”, apuntó.

Frente a los 150 delegados de base convocados los Aceiteros planetaron una propuesta concreta: que el movimiento obrero elabore su propio programa para presentar a los gobiernos de turno. “Hay que dejar las mezquindades de lado”, planteó el líder aceitero en referencia a la interna sindical.

El plenario como se planteó desde su organización fue un espacio de convergencia gremial, donde la presencia de dirigentes de otros sindicatos y rubros de labor se destacó. Disertaron allí Juan Carlos Schmid, secretario general de la Federación Marítima Portuaria y de la Industria Naval (Fempinra) y del Sindicato de Dragado y Balizamiento. El rosarino abogó por definir una agenda que incida políticamente. “Ahí debe estar presente la lucha por el salario, la dignidad, y el Estado. Debemos armar un frente que exceda lo sindical y tenga incidencia en la discusión política”, resaltó.

El titular de la Asociación Bancaria (AB), Sergio Palazzo sumó su voz en cuanto a la necesidad de un programa obrero que realce cuestiones como empleo y salarios.
"Pero también debemos abarcar la vivienda, la educación, la energía, los servicios públicos y las finanzas".
Apuntando a la gestión libertaria refrendó que "el manual de la derecha, del neoliberalismo es el mismo en todo el mundo: flexibilización laboral con menos derechos más horas de trabajo por menos sueldo".

 Sergio Palazzo (Bancarios) y Yofra (Aceiteros)

También el secretario general de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), Rodolfo Aguiar, se sumó al llamado a la unidad: “Si queremos que la salida sea a favor de los trabajadores tenemos que conformar un Frente Sindical sin importarnos a qué central sindical pertenezca cada organización”.

“Este gobierno llegó con el programa de la última dictadura bajo el brazo y para destruir puestos de trabajo para además demoler nuestros ingresos. Dicen que crece la economía ¿En qué sectores? Las energéticas, las mineras y las financierasm los sectores que menos mano de obra demandan”.

Domingo Moreyra, secretario general de la Federación de Obreros Ceramistas (Focra), describió la la realidad de ese rubro donde hubo y hay despidos como en el caso de Cerro Negro. “No queda otro camino que la pelea y la lucha. Como gremio ceramista atravesamos uno de los momentos más difíciles de los últimos años porque abrieron la importación. Vinieron los despidos en Cerro Negro, y respondimos con huelga. Vamos a pelear con uñas y dientes. No sé si nos va a alcanzar, pero vamos a pelear”, aseguró, e instó a cada trabajador a convertirse en un activista para sumar músculo gremial. “Tenemos que sumar voluntades para la pelea que tenemos que dar”, propició.

Pensando en la economía y realidad social del país no es atrevido pensar que de aquel MTA de los 90 se mantienen la vigencia sus ejes, los que a su vez que había profetizado Spinetta ya que “Los libros de la buena memoria” incluyen “vestigios de futuro”, un fenómeno que certifica este 2025.