El escenario de la negociación colectiva para los trabajadores del sector público vuelve a estar signado por el conflicto en virtud del rechazo de una de las organizaciones gremiales del sector.
La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) se declaró en estado de alerta luego de rechazar el 1,5% para enero y 1,2% en febrero propuesto por el Gobierno,  que en cambio tuvo la aceptación de la Unión de Personal Civil de la Nación (UPCN).
“Esta propuesta da asco. No solo no mejora sino que empeora y profundiza la crisis de ingresos en el sector público”, le expresó el titular de ATE Rodolfo Aguiar a este diario. El sindicalista patagónico reforzó las críticas que viene disparando contra la Casa Rosada. En ese tono manifestó que en su dinámica el gobierno “no solo le falta el respeto a los compañeros y compañeras sino que usa esa paritaria para disciplinar y condicionar el resto de las negociaciones salariales en el sector público y en distintas actividades privadas”, enfatizó Aguiar.

Para ATE el objetivo del gobierno sigue siendo lograr el equilibrio fiscal “a costa de asaltar los bolsillos de los estatales y de los jubilados”, al tiempo de recordar que los aumentos salariales que recibieron durante el 2024 quedaron por debajo de la inflación.
“Debemos responderle con un paro en toda la administración pública”, acotó el sindicalista.
Con el mismo énfasis seguró que, “desde que Javier Milei tomó el timón del país, perdieron más de 40 puntos y la oferta bimestral parece «una provocación que va a acelerar la conflictividad en el Estado”.
La propuesta del gobierno establece una suba adicional para aquellos sectores que reciben una remuneración en concepto de presentismo que se incrementa de $30.000 a $50.000, en el marco de la paritaria que comenzó en junio y se extiende hasta el mismo mes del 2025. El acumulado como reseñaron desde UPCN ronda el 16,22%.