Ante el aumento explosivo de casos de contagios de coronavirus por el que  atraviesa la provincia de Buenos Aires en los últimos días, el gobierno bonaerense evalúa que varios municipios deberán regresar a una fase 3, por lo que por estas horas se analiza restringir algunas actividades recreativas no así a las vinculadas a las actividades económicas.

En una conferencia de prensa en la que se repasó el aumento "estrepitoso" de casos registrados en la última semana en el territorio bonaerense -167% el sábado y un 215% el domingo-, hoy, el jefe de Gabinete Carlos Bianco, anunció que están trabajando con el Comité Operativo de Emergencias de la provincia "en la revisión de las actividades de la fase 3" porque "creemos efectivamente que si continúa el aumento de casos a este ritmo, más temprano que tarde, vamos a tener que restablecerla con algunas restricciones adicionales".

En esa dirección, dijo que están analizando "cuales serían esas restricciones",  procurando "mantener la producción, el empleo, pero fundamentalmente priorizando la salud y la vida" de todos los bonaerenses.

Por su parte, el jefe de asesores del Ministerio de Salud de la provincia, Enio García, señaló que se viene trabajando "con un indicador que es la ocupación de las camas, fundamentalmente las de cuidados intensivos y el vínculo entre la economía y la salud" que es lo que hay que mirar con atención, "porque un efecto negativo que tiene la pandemia es la generación de una crisis económica", señaló .

Agregó que se está priorizando "que las actividades productivas estén funcionando lo máximo posible", pero evitando también por otro lado, que se genere el "colapso del sistema de salud" porque si eso sucede se estaría en el "peor escenario posible".

Señaló que las medidas que se están analizando ante la segunda ola "irán de una manera escalonada y van a priorizar lo que tiene que ver con las medidas recreativas y no tanto con las cuestiones vinculadas al sector productivo o industrial", detalló García.

García explicó que "lo que hay que entender es que el contexto cambió porque logramos un aumento en la capacidad del sistema de salud, el que obviamente no es infinito, pero a diferencia del año pasado cuando empezó la pandemia, nos paramos desde otro lugar".

Ante esto, "estamos evaluando que medidas vamos a tomar y la fase tres que teníamos el año pasado no necesariamente es lo que vamos a hacer ahora", explicó el asesor, quien indicó que se está pensando aplicar "una especie de botonera donde iremos tomando medidas en función de como viene la curva,y la idea es priorizar que la actividad económica siga funcionando e ir yendo a controlar más la cuestión  recreativa", no tanto la que se realice al aire libre.

Respecto a la actividad gastronómica, García ejemplificó al canal C5N que "la idea no es ir a un cierre" sino más bien "empezar con la restricción de horarios, y si eso no tiene el impacto que necesitamos", que esos locales funcionen "en veredas, en lugares abiertos o terrazas", pero no con comensales "dentro del local, porque aumenta el riesgo de contagios".

"Queremos ir avanzando de manera escalonada para ir evitando al máximo posible que alguna actividad económica se paralice", pero si llegara el caso de que el sistema de salud esté en un riesgo de colapso, "ahí habrá que tomar medidas más duras que apunten a restringir la circulación de las personas, pero eso lo dejamos para el final".    

Cabe recordad que la fase 3 tal como se la aplicó durante la primera etapa de la pandemia, contempla, entre otras cuestiones, la prohibición de las actividades deportivas colectivas; los eventos culturales, sociales o recreativos; el funcionamiento de los shoppings; los gimnasios cerrados.

Contempla además, la actividad de los locales gastronómicos pero con aforos más reducidos, y restringe el desempeño del personal doméstico no multidomiciliario; las ferias itinerantes de alimentos y los museos, entre otros ítems.